viernes, 22 de marzo de 2013

Frenesí


Camino. Esta noche es muy ventosa, me dijo. Voy muy deprisa. Me detengo y volteo atrás, tengo la sensación de que alguien me sigue. Sigo mi camino y lo único que pienso es ¿por qué? ¿Por qué hoy? ¿Por qué ahora?
Pudo haber sido cualquier pinche día de todos estos años y tuvo que ser hoy.
Me tallo el ojo y la frente de una manera frenética, como si así pudiera acomodar mis pensamientos o mi alma.  ¡Gracias por desatar mi locura!, repito una y otra vez en la mente.
De pronto me doy cuenta que la sensación de persecución es un síntoma de lo mucho que lo amo y justo esa sensación es la que me provoca cuando lo pienso. Recuerdo el primer día que lo vi, me pareció que era único, que nadie más que un extraterrestre o un loco podía usar esa prenda de manera tan desenfadada. Desde ese día captó mi atención.
Mientras volteo para cruzar la calle, me altera otro recuerdo: el día que me di cuenta que no eran sólo mis hormonas, que lo amaba, y repasé en mi mente como se paró y se fue a su cuarto mientras yo fingía dormir en su sillón.
Revuelvo mi cabello como una loca, lo soy, siempre lo he sabido, pero hoy me siento completamente pendeja. Usted sabe lo que provoca y aún así lo hace, ¿por qué?, ¿qué no sabe que le puedo tomar la palabra?
Lloro, no puedo más que llorar. Lloro y no me importa que me vean los transeúntes, sería la primera vez que me ven llorar por usted. La nada, eso es usted, una puerta a la nada, una maraña de recuerdos, miradas y detalles intangibles. Usted.
Llego a mi destino. Me limpio la última lágrima y acomodo mi cabello, para que no se me note lo alterada. Antes de entrar pongo mi cara de apatía -que es la que mejor me sale en estos casos- y entro. Usted esperará, tengo que hacerle saber al mundo que estoy...

miércoles, 6 de marzo de 2013

Presentación -no oficial-

¿Qué hacer cuándo un día descubres que lo que vives no es lo que quieres?
Soy yo, una "persona rara", me lo han repetido desde los 3 años. Pocas personas me pueden describir y siempre dejo que se queden con la primera impresión.
¿Qué impresión les quiero dejar? No tengo idea, podría decirles en qué creo, pero al fin de cuentas eso no determina cómo soy.

Creo en la libertad, en los derechos, en usted, en el amor, en la energía del universo.

También podría decirles en qué no creo, aunque eso tampoco me define.

No creo en la religión, en las relaciones monógamas, en los estereotipos, en la "moral y las buenas costumbres" y menos en que todo el mundo tiene que ser como todo el mundo dice que "debe de ser".

Les diré parte de mis características de mi personalidad, aunque soy tan cambiante, que un día pensaran (al leerme) que no soy como dice aquí que soy.

Soy contradictoria, terca, impulsiva -a veces-... hay días que ni yo me conozco. Soy honesta y muy difícil de tratar.

Lo que sí se, es que quiero compartirles lo que pienso. (Cuando menos espero estoy diciendo cosas que a nadie importan o a todo el mundo ofenden, -mi remedio, este blog- espero con esto poder evitar la vergüenza de los demás al escucharme y esas "cosas" que digo a bote pronto se queden almacenadas aquí).

¿Por qué leerme? - Pues no sé ¿Por qué no?

Abrazos de paz.